Los Mochis, Sin., a 11 de octubre de 2023.- El Gerente General de la JAPAMA, Bernardo Xavier Cárdenas Soto, aclara que la empresa Gilfor si trabaja para la Paramunicipal, el contrato lo avaló el Consejo de Administración, pero no cobra, solo está facultada para hacer notificaciones, avisos y limitaciones.

"Es una empresa contratada por la Junta de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Ahome y avalada por el Consejo de Administración, para recolectar y ayudarnos a disminuir la cartera vencida, se encarga de hacer limitaciones, invitaciones y dar avisos a los ciudadanos que tienen problemas con la JAPAMA, para que acudan a las oficinas a ponerse al corriente y que los podamos ayudar, aclaro, ellos no pueden cobrar, dan avisos, hacen limitaciones.

"No le paguen, ellos no cobran, el mismo representante de la empresa nos ha dicho si a alguien le ofrecen dinero y se lo acepta lo pueden denunciar y lo despiden, porque ellos corren el riesgo de perder el contrato, ellos no cobran, ellos hacen limitaciones, hacen notificaciones, hasta ahí", dijo.

Indicó que se recurrió a este apoyo porque la Junta tiene una gran cantidad de morosos, arrastra una cartera vencida de 550 millones de pesos y el personal que realiza esta labor es insuficiente, a esto se suma el problema que se tiene con las reconexiones, ya que apenas se les limita el servicio a los deudores, se reconectan ilegalmente.

El Titular de la JAPAMA comentó que el contrato con esta empresa sonorense, no es un secreto, está bien documentado, inició este año, en su administración y se le paga un porcentaje, alrededor de un 10 o un 30 por ciento, dependiendo de la recuperación de pasivos que realice.

Cárdenas Soto reconoció que aún no se cumplen las expectativas de recuperación, porque además de las reconexiones, la empresa se enfrenta a terrenos baldíos y casas solas, ahí hace el trabajo, pero no recupera nada, porque son cuentas prácticamente incobrables. 

Añadió que con esta medida JAPAMA busca ser más efectiva en la cobranza para sanear las finanzas, para que la gente se acostumbre a pagar y que esos recursos se puedan reintegrar a la sociedad mediante la reparación de fugas y drenajes, así como en el reemplazo de tuberías.